Thursday, July 14, 2011

La Venganza En El Matrimonio



La venganza es una actitud de castigar o desquitarse con un ofensor.
La venganza es una actitud casi automática en el corazón de la mayoría de los seres humanos y daña el corazón de quien la ejecuta y de quien la recibe. ¡Me la hiciste, me la pagas!

En el matrimonio es normal que nos ofendamos al menos algunas veces. Puede ser por descuidos, por falta de atención, por mala comunicación,  y por muchas otras razones más. Cuando se genera una ofensa entre dos seres humanos, normalmente hay una tendencia inmediata a vengarse del ofensor.
Muchas veces ofendemos sin estar conscientes de la ofensa, pero entonces el cónyuge reacciona con una actitud agresiva o indiferente con nosotros y no entendemos porqué. Entonces reaccionamos con otra arma de contraataque y así se va deteriorando la relación.

La venganza no conoce el amor; porque no es capaz de perdonar. La venganza siempre va a tratar de poner la justicia humana primero que la justicia de Dios, porque es una reacción de la carne. La venganza nunca sana ni soluciona un conflicto, por el contrario genera una cadena de contra-venganzas que finalmente puede destruir una relación. A veces se expresa la venganza pasivamente, negándole el amor al cónyuge, siendo indiferentes y haciendo cosas que le demuestren al cónyuge su enojo.

1 Pedro 3: No devolváis mal por mal, ni maldición por maldición, sino por el contrario, bendiciendo, sabiendo que fuisteis llamados a heredar bendición.

Aún cuando seamos conscientes de la ofensa, Dios nos da la instrucción correspondiente cuando somos afectados por otra persona: No debemos devolver la ofensa, sino perdonar inmediatamente devolviendo la ofensa con una bendición sincera. Luego busca el momento y el lugar oportuno para expresarle a tu cónyuge el dolor que sentiste por la ofensa, sin acusarle ni juzgarle, solamente expresando el sentimiento. De esta manera se evita el veneno de la venganza y pueden resolver la situación a la manera de Dios.

Hay ofensas que son difíciles de soportar y que ponen a prueba nuestra madurez como hijos de Dios. Por esta razón es que debemos alimentarnos espiritualmente con un devocional diario que nos de la capacidad de sobreponernos a una ofensa y mantenernos obedientes a nuestro Padre Celestial.

Vencer una debilidad como la venganza y a cambio tener la capacidad de bendecir y hacerle el bien a quien nos ofendió, es una manifestación de obediencia y amor a nuestro Padre Celestial que va a activar hermosas bendiciones a nuestra vida, entre ellas la paz, el gozo a pesar de, prosperidad y mucho más.
Si has reaccionado en venganza contra tu cónyuge, pídele perdón a Dios primero y luego habla con tu cónyuge y pídele perdón por haber reaccionado con una actitud venganza. Exprésale tus sentimientos, tu dolor por alguna circunstancia que provocó la venganza y comprométanse a no ejercer nunca más esa actitud.


Luis y Hannia Fernandez


¿Por qué se enfrian los matrimonios?

El enfriamiento en la relación matrimonial ocurre fundamentalmente por falta de atención!
Los matrimonios que no alimentan la relación emocional corren el riesgo de enfriarse. Dios nos creó como seres espirituales, pero también emocionales y también físicos.




La relación emocional en un Matrimonio es muy necesaria. Significa darse atención mutua, compartir momentos especiales juntos, salir de vez en cuando como pareja, hacer planes para estar juntos, etc.
Una de las primeras y más importantes recomendaciones que le hacemos a los matrimonios que vienen a nuestra oficina, es que dediquen una noche a la semana, preferiblemente los Viernes, para hacer una “cita” con su cónyuge.

En esta cita, deben tratarse como novios. Este hábito hace que la pareja vuelva en alguna medida, a vivir la emoción del noviazgo y eso trae gozo a la relación.

Todos los matrimonios pasamos por circunstancias difíciles, unas más que otras; y eso es inevitable. Pero si alimentamos la relación con una cita a la semana y con otras interacciones positivas, los aspectos negativos van a tener menor influencia y vamos a poder superar cualquier conflicto más fácilmente.
Varones, debemos ser más románticos con nuestras esposas. Para ellas, el romance no acaba nunca. Cuando una esposa no percibe de su esposo una actitud romántica con ella, entonces no se siente amada y frecuentemente piensa que su esposo tiene interés en otra persona.
Tenemos que reconocer que por lo general la relación se enfría por causa del hombre, ya que es él el que tiene que ser el pro-activo de la relación, el que marca la iniciativa. Así fuimos diseñados. Una esposa que recibe atención romántica de su esposo, atención y un trato amoroso, va a funcionar muy bien como mujer ayuda idónea, compañera, amante y todas sus funciones de esposa.

Varones, no dejen que se enfrié la relación con su esposa. Mantenga su atención sobre ella, dígale palabras bonitas siempre, manifiéstele un cariño y un cuidado especial. Saque una noche a la semana para hacer una cita romántica con ella, aunque sea a caminar alrededor de su barrio o ciudad y comer un helado. Al menos una vez al año saquen un fin de semana para compartir juntos como pareja. Busquen quien les cuide sus niños de vez en cuando, para que ustedes puedan cuidar su matrimonio.


Tu matrimonio y tu familia es el tesoro más valioso que Dios te ha dado.
CUÍDALO!

Luis Y Hannya Fernandez

No comments:

Post a Comment

Deja Tus Comentarios Queremos Saber Tus Impresiones, testimonios y subgerencias.